Esta ley al colectivo que represento le da un marco y una presencia como para tratar determinadas cosas y determinados temas y, por lo menos, tener voz y voto.
La voz es muy importante, aunque no tenga voto.
Integrantes de la Comisión de Eduación y Cultura de la Cámara de Senadores se reunieron este lunes con integrantes de los colectivos teatrales ATI-SUA-FUTI y del Ministerio de Cultura.
Se trataron dos temas, la Ley n.º 19821 de Promoción del desarrollo del teatro independiente, de 18 de setiembre de 2019, y el proceso de reapertura de teatros y salas de espectáculos.
La Comisión de Educación y Cultura del senado la integran Carmen Sanguinetti, Carolina Cose, Graciela BIanchi, Liliana Kechichian y Guido Manini Ríos
En la primera parte de la reunión fueron recibidos el ministro de Educación y Cultura, Pablo da Silveira,la subsecretaria,Ana Ribeiro, y la señora directora nacional de Cultura, Mariana Wainstein.
Luego fueron escuhados los representantes de la Sociedad Uruguaya de Actores,Federación Uruguaya de Teatros Independientes y Asociación de Teatros del Interior.
Dijo Mercedes Rusch de ATI.
Tenemos realidades diferentes a las de las grandes urbes.
No me gusta la grieta entre el interior y Montevideo, me gusta hablar de colectivos sociales chicos y grandes que tenemos distintas realidades.
En casi un 99,9 % el teatro en el interior es independiente
Para nosotros es muy importante integrar este consejo y para ello vamos a solicitar a los señores senadores que consideren la posibilidad de apoyarnos.
Transcripción de las palabras de Mercedes Rusch
Soy Mercedes Rusch, secretaria general de la Asociación de Teatros del Interior.
A nosotros, como colectivo, nos pareció importante participar en esta iniciativa y en este camino. Tenemos realidades diferentes a las de las grandes urbes. No me gusta la grieta entre el interior y Montevideo, me gusta hablar de colectivos sociales chicos y grandes que tenemos distintas realidades. En casi un 99,9 % el teatro en el interior es independiente. Si en sus vidas políticas recorrieron el interior se habrán dado cuenta de que no hay comedias municipales y no es un demérito no tenerlas o tenerlas, solo son caminos y estructuras sociales que se van dando. La Asociación de Teatros del Interior es un colectivo que tiene 37 años, 17 bienales con encuentros regionales de teatro con el objetivo de crecer y donde no hay formación académica. Aclaro que nada de lo que digo debe ser tomado como una crítica, sino como el camino que recorremos para crecer, que creo que es lo que tiene que buscar cualquier colectivo. Entonces, la primera cosa importante de esta ley para la Asociación de Teatros del Interior es que nos da la herramienta para integrar un consejo nacional que va a atender al teatro independiente que, como dije, es el 99,9 % del teatro del interior con distintos formatos y apoyos. Esto nos da presencia en la toma de decisiones de determinados recursos. Ya hay experiencias al respecto y han sido buenas para todas las partes. Entonces, hoy estamos acá en representación del colectivo, solicitando que se busque una herramienta para alimentar financieramente esa ley. Una vez que esa ley se alimente, se reglamente, se forme el consejo administrador, con seguridad van a surgir cosas que habrá que ajustar, pero el hecho de que esté alimentada es muy importante. Muchos de ustedes recorren el interior, así que no les puedo decir lo que significa el teatro independiente en el interior.
Sin duda, el teatro independiente en el interior es un intangible que interactúa con los colectivos en forma inmediata y hay que hacer acuerdos tácitos entre los individuos para no discutir de otros asuntos, a fin de sobrevivir como colectivos en pueblos de 10.000 o 20.000 habitantes. En los pueblos estamos los que hacemos teatro y hay quienes trabajan en otras áreas, como las comisiones de baby fútbol. Cada uno se encarga de su parte. No sé si eso está bien o está mal, pero así es como funciona en el interior en lo que respecta a los grupos sociales chicos.
Para nosotros es muy importante integrar este consejo como colectivo del interior, con el fin de crecer y asociar nuevos grupos. La idea es reunirnos y con esta herramienta económica brindar formación en un grado aún mayor que el de ahora. Desde que la Asociación de Teatros del Interior –ATI– se fundó, ha llevado a cabo la tarea de formación con el apoyo del Estado por distintas vías, en especial a través del Ministerio de Educación y Cultura.
La que estamos considerando es una herramienta que puede favorecernos como actores directos para gestionar más formación y trascender el tema de la circulación. Nosotros tenemos tres patas, una de ellas es la formación y otra la circulación. Esta última, sin duda, resulta muy costosa, ya que debemos trasladarnos 90 kilómetros para ir a un pueblo cercano a llevar una obra para treinta o cuarenta espectadores. No hay que olvidar, además, lo relativo a las puestas y la forma de moverlas.
Por estas razones, para nosotros es muy importante integrar este consejo y para ello vamos a solicitar a los señores senadores que consideren la posibilidad de apoyarnos.
Mercedes Rusch,Secretaria General de la Asociación de Teatros del Interior ATI,en otra parte de su intervención afirmó:
En representación de la Asociación de Teatros del Interior quisiera decir una verdad de Perogrullo: este país no tiene circulación transversal. Somos centralistas. No es una vergüenza, pero es algo que tendríamos que cambiar. Es carísimo; si venir para acá es caro, ir para otros lados es imposible porque hay que tener otra movilidad.
Sumándome a lo que dice Alicia Dogliotti en cuanto a que esta ley cubre todas las realidades, que es lo importante, señalo que los teatros del interior son todos chiquitos. Cualquiera que tenga cabeza y haga números puede pensar para qué una población de diez mil habitantes querría una sala de quinientas personas. No es rentable; no tendría que ser así. ¿Y los pueblos cómo lo resuelven? Con la realidad; y lo que generamos es cultura y eso es algo bueno a tener en cuenta. Por supuesto que cuanta más formación académica se tenga es mejor, ¿quién no lo sabe? Eso está en la tapa del libro. Los autodidactas son los pioneros, ¿y los demás? Hay estructuras que respaldan la formación en cualquier actividad que realice el ser humano, pero generar escuelas o formación académica para gente que tiene talento pero que económicamente no tiene cómo acercarse es de las cosas que figura en la ley que ustedes votaron. Eso incentivó al colectivo que represento a apoyarla. Voy a dar números. Muchísimos de los docentes de quinto y sexto de bachillerato artístico salieron de los talleres que de distintas formas brindaba la Asociación de Teatros del Interior, porque son abiertos y la mayoría de las veces están apoyados por el MEC y también por las empresas. En esa transición los docentes salieron de ahí.
Hoy me parece importante rescatar frente a ustedes –quizás esta sea la única oportunidad de toda mi historia en la que esté sentada en esta mesa– que los grandes países han colonizado con la cultura. Hablo de países grandes por su poder y no por otras grandezas. Siempre han colonizado con la cultura de cualquier tipo y color. Quiere decir que el intangible «cultura», que es la identidad de un pueblo, se genera donde hay gente, donde hay cincuenta, cien o doscientas personas. En los colectivos chicos y en las ciudades pequeñas no tenemos más remedio que vivir en el Gran Hermano. Yo no salgo de un apartamento donde no veo a mi vecino. Cuando salgo, el vecino al que le dije cualquier improperio en una determinada circunstancia es el que me ayuda a levantarme en la calle si me caigo, porque estoy grande. Entonces, estamos ante una realidad social diferente, pero en la que se generan elementos de cultura. A veces se resuelve la beca de un joven, pero en otros casos hay que crear escuelas y brindar formación. En algún momento la compañera fue representante de un ministerio y de talleres que fueron un antes y un después en la formación de directores. ¿Qué sucede? Que hay herramientas que para nosotros son muy útiles porque nos permiten generar nuestro propio lenguaje y nuestros contenidos.
En un momento determinado, una persona por quien tengo un gran aprecio y que quiere mucho al interior dijo: pensé que iba a venir a estos encuentros regionales que fueron tres en un año y una bienal, y resulta que no encontré una corriente del interior. ¿Y por qué nosotros tenemos que ser una corriente? Corriente tiene el río Uruguay, nosotros no somos camalotes.
En definitiva, creo que tenemos muchas cosas para decirnos entre nosotros y muchas cosas para decirles a los demás, como que tenemos nuestra propia identidad y que esta ley nos da el marco para estar presentes en la toma de decisiones. Es difícil para nosotros tener que contar con cuatro horas y media de viaje para venir y cuatro horas y media para volver –no le sumen la covid-19, déjenlo aparte porque esto va a pasar; va a venir otra gripe–, pero nueve horas para venir a tener una reunión de tres horas en representación de un colectivo –no estoy hablando de mí, sino de cualquier colectivo– demuestra un compromiso de parte de esa persona que deja cosas personales –como seguramente también ustedes lo hacen– para estar acá.
Entonces, esta ley al colectivo que represento –vuelvo a decir– le da un marco y una presencia como para tratar determinadas cosas y determinados temas y, por lo menos, tener voz y voto. La voz es muy importante, aunque no tenga voto.